Masoquista

viernes, 23 de noviembre de 2007

4 confesión (es)  

Este año me siento tan solitario en el Colegio, tanto que hoy ya no aguanté más y lloré; lloré por lo que no quería hacerlo, lloré por lo que "ya no está".
Veo como vagan por mi mente las rosadas flores de la amistad y se marchitan con la llegada del verano en mi corazón, el invierno mata cada hoja y el otoño trata de salvar el más minúsculo pistilo.
Este año me apoyaba nada más en él (y uno que otro consejo de "madurez"), pero ahora último no siento que esté ahí, no siento que sea lo mismo y eso me "hiere".
Veo como los planetas danzan en torno a la luminosa y gravitatoria estrella que los torna asamblea, como el mensajero se congela en su cercanía al candor.
Este año me siento, ahora "sin pilares", me siento un techo flotando en el vacío, en el vacío que está lleno de gente por todos lados, lleno de gente vacía.
Veo como el minotauro de multiples caras protege un templo dentro de un laberito de los ataques de los pueblos que hieren con filosas plumas entintadas en sangre y de los dibujantes con sus lápices de carbón ardiente.
Este año me siento, desde hace unos instantes, un traidor y un inepto; un ser incapaz de crear algún lazo que no termine en punta o tenga nudos en su extensión.
Veo como se desenmascara una gran mentira dentro de los maquillajes del teatro y a su vez el tiempo va desgastando el maquillaje de las ilusiones sin sentido.

Este año me siento y animo para ver las cosas...

Fiebre Interna

martes, 6 de noviembre de 2007

3 confesión (es)  

Algo así me dijo y me preocupó (y preocupa) mucho.
No lo notó porque iba con sus ojitos cerrados, pero mis ojos estaban a punto de llorar cuando tenía esas pequeñas convulsiones mientras dormía y yo sólo le sujetaba la mano por mi estúpido, pero razonable, miedo a la gente.
Me dan miedo las enfermedades e incluso ahora me siento medio mal, impotente porque no puedo hacer mucho para ayudarle; creo que lo único de que dispongo es de mi mala circulación que me mantiene las manos heladas y con ellas enfriarle un poco la cabeza (y acompañarle, claro).
Me siento ñoño (como dirían unas personas por ahí), porque tengo mis ojos lacrimosos y un nudo en la garganta mientras escribo esto.
Fuera de eso, me siento mal conmigo mismo; me encuentro tan inútil y tan poco interesante a veces que me deprimo hasta que me doy cuenta que son puras tonteras las que me pasan, porque si fuera verdad todo lo que pienso estaría muy solo.
Eso no quita que esa persona me moleste, me da tanta frustración el verlos tan animados cuando están juntos.
Pero son 'cosas que pasan', 'cosas de la vida' y están porque deben estarlo, ¿no?
Sí, no quise escribir como lo hago siempre, sólo quise escribir lo que sentía y relajarme un poco... Disculpas a los que esperaban algo mejor ^^U...